jueves, 9 de mayo de 2019

Muslos de pollo estofados con pimientos


 

Nos hacemos con ocho muslos de pollo honrado que se haya criado correteando por el corral. Limpio y prontos. Pimientos rojos, verdes y amarillos; dos de cada. Los limpiamos de semillas y nervios y troceamos en porciones generosas.
En aceite de oliva perfumado de ajo doramos ligeramente los muslos después de haberos salpimentado. Reservamos.
Ahora van a la cazuela en esa misma grasa la pimentada toda a la que damos un vuelco para que se impregne antes de recibir el peso de los zancos.

 Servido en bocadillo para almuerzo. Aliñado con Tabasco chipotle...

 Tapamos la olla y dejamos cocer a fuego bien suave. Soltarán  los pimientos mucha agua. Dejamos que reduzca el líquido, si los muslos están cocidos los retiramos y continuamos reduciendo.
Al perder un cuarto del agua. Ligamos con una nuez de mantequilla y reincorporamos las patas de pollo. Servimos con pasta, arroz, quinoa o puré de patata. Es la mejor forma de disfrutar la extraordinaria salsa que se produce cuando la gelatina de las patas liga el jugo de pimientos.



No hay comentarios: