martes, 25 de octubre de 2016

Ensalada de búlgur con verduras al horno




No proveemos de 300gr de búlgur y lo dejamos a remojo durante una media hora. Lo escurrimos de esta agua y en agua fresca salada que sea el doble de su volumen, lo cocemos a fuego lento durante un cuarto de  hora. Escurrimos, refrescamos y aliñamos con AOVE, pimienta y zumo de  limón. Reservamos.

Precalentamos el horno a 170ºC. Mientra tanto vamos cortando en trozos grandes y alargados un pimiento morrón, un calabacín hermoso. medio bulbo de hinojo, una cebolla, cuatro dientes de ajo, una berenjena  y una zanahoria. Cubrimos con todo esto una placa de horno, rociamos de AOVE, pimienta y sal. Horneamos uno tres cuarto de hora.

Mientras buscamos unas hojas de menta, unas ramas de perejil, tomillo y orégano. Hacemos un picadillo muy menudo. Reservamos.


 Cuando las verduras están listas, las retiramso del horno, rociamos con vinagre de Jerez y  dejamos enfriar. Frías, las picamos menudas.

Mezclamos las verduras con el búlgur, aderezamos con la mezcla de hierba, rectificamos de sal y vinagre y dejamos reposar.

lunes, 24 de octubre de 2016

domingo, 23 de octubre de 2016

Chuleta de ternera a la plancha




Se trata de preparar una chuleta de ternera de la mejor calidad posoble aromatizada con hierbas frescas en  un plato único y rápido de comida o cena solitaria.

 
Picamos tomillo, salvia y romero con un par de diente se ajo. La chuleta la salamos. pimentamos y untamos con aceite de oliva



A continuación la impregnamos con el picadillo de  hierbas y ajo.


Calentamos la sartén cuya superficie nos servirá de plancha, la untamos levemente con aceite de oliva y la hacemos vuelta y vuelta. El primer minuto a fuego vivo,  los restantes 4 a fuego suave. Igual por el otro lado.
Acompañamos de huevos bio y tomate plancheados o la guarnición que nos apetezca: lechuga, pimientos asados, espárragos,  patatas reposadas y aliñadas…


sábado, 15 de octubre de 2016

Patatas gallegas aliñadas



Nos hacemos con patatas de pequeño tamaño de buena calidad, unas kennebec cultivadas en Galicia no sería mala elección..
Las lavamos y las cocemos en agua sin sal sin quitarles la piel, más o menos veinte minutos. Las escurrimos y dejamos enfriar. Las refrigeramos 24 horas. Esto último es muy importante para que se genere el almidón retrogradado (V. enlace)
Las pelamos y las aliñamos con ajo picado muy menudo, pimienta blanca, aceite de oliva virgen extra y sal marina gruesa.
Guarnición de categoría: deliciosa y muy conveniente para el crecimiento de nuestra microbiota (la flora intestina de toda la vida…).
Documentarse en el siguiente enlace:


lunes, 10 de octubre de 2016

"Rillettes" de paletilla de cerdo



  • 3,5 Kg. de paleta de cerdo
  • Pimienta negra
  • Ajo trinchado
  • Tomillo en rama
  • Canela en polvo
  • Menta fresca
  • Romero
  • Sal
  • Manteca de cerdo
  • Caldo de huesos


3,5 Kg. de paleta de cerdo sin piel, deshuesada y cortado a trozos regulares.  Deshuesada y troceada la carne la impregnamos con pimienta, canela, tomillo, menta, romero y cilantro. Quedará en este adobo durante veinticuatro horas, mejor si es al fresco fuera de la nevera.
Doramos la carne en grasa de cerdo.



Va al horno, cubierta de papel de hornear, en cocote tapada  durante unas cuatro horas con el caldo de huesos y algo de manteca de cerdo.


Retiramos la carne del horno y la sacamos del recipiente. La vamos deshilachando y, finalmente incorporamos líquido de la cocción que humedezca sin que llegue a encharcar el conjunto.
Llenamos recipiente de vidrio o cerámica con la vianda dejando un centímetro hasta el borde.



 Los dejamos enfriar en la nevera y acabamos de cubrir con grasa de la cocción -después de haberla separado del caldo- para aislar del aire. Cerramos hermético y conservamos refrigerado.


Sacamos de la nevera con antelación antes de consumir.

El otoño se sube a la parra.

miércoles, 5 de octubre de 2016

Calamares de la ría de Vigo guisados en su tinta




 El nombre del bicho hace referencia a la tinta que suelta;  “calamar”  vine del italiano “calamaro” y este del latín, así: 
calamar < del italiano dialectal “calamaro” < en italiano estándar, “calamaio”< del antiguo italiano “cálamo” (pluma de escribir) y “cálamo”< del latín “calamus” (pluma de escribir, tintero)


¿4 personas?
8 Calamares medianos para cuatro persona; limpios, cortados en rodajas, picados sus tentáculos y reservada su tinta
½ cebolla grande bien picada
2 dientes de ajo que hayan corrido la misma suerte que la cebolla.
½ pimiento morrón picado
1 golpe de pimentón dulce
Una punta de azafrán molido
Un toque de pimentón picante
Pimienta
Un chorro de vino blanco
Perejil picado
Aceite de oliva
Sal

Ponemos desbravar en sofrito la cebolla. el ajo, el pimiento. Que caramelice a fuego lentito. Si se agarra, echamos un poquito de vino blanco y que continúe haciéndose. Mientras,  le incorporamos el pimentón dulce y el azafrán molido.
Cuando la cebolla esté convenientemente  confitada, incorporamos el calamar cortado, la pimienta, el vino blanco, la tinta que hayamos reservado y el pimentón picante. Apuramos el fuego hasta hervir y lo bajamos al mínimo.
Cuece tapado durante  unos 45 minutos aprox.

 Las manos más dulces...

lunes, 3 de octubre de 2016

Berenjenas al horno gratinadas con queso de cabra


Picamos dos dientes de ajo un pimiento verde y cuatro o cinco pequeñas guindillas(*) frescas y sofreímos el conjunto en la sartén con aceite de oliva. Al poco, añadimos un tomate hermoso o dos troceado y dejamos que vaya perdiendo agua. Salpimentamos y ponemos su punta de orégano y pimienta. Reservamos



Precalentamos el horno a 180ºC .
Mientra tanto, cortamos cuatro berenjenas longitudinalmente y en rodajas de medio centímetro más o menos. Las ponemos en una sartén y le damos un calor, que se vayan queriendo dorarse pero sin llegara a hacerlo.
Las ponemos en una fuente de horno y cubrimos con el tomate y compañía.
Va al horno durante unos treinta minutos. 


Ahora puede cubrirse con queso de cabra u oveja rallado y unas nuececillas de mantequilla y gratinar el conjunto. O podemos hacer raciones individuales y gratinarlas a medida que se requiera reservando el resto.


(*) Estas pequeñas maravillas rojas, crudas, no pican; pero picando carne y simiente y salteadas se ponen bravas. Si no os gusta el picante, no las pongáis.