lunes, 30 de noviembre de 2020

Crema de Verduras


Primero, una crema requiere un buen caldo. No importa que sea de huesos de ternera, de pollo, resultado de la elaboración de un cocido… Da igual, emplea el que tengas. El caldo habrá recogido la substancia de la cocción; será el alma de la crema. Y nadie quiere una crema desalmada.

Segundo, la crema pide abundancia de verduras de temporada o no: calabaza, calabacín, zanahoria, cebolla, apio, puerro, bulbo de hinojo, chirivía, ajos, tomates… todo cortado.

Tercero, dora las verduras en aceite de oliva antes de iniciar la cocción y añádele un buen toque de granos de pimienta enteros.

Cubre con caldo y si no te llega completa con agua. ¡Ni se te ocurra utilizar pastillas de caldo concentrado!

Deja que hierva y reduce el fuego para que cueza suave hasta que todas las verduras estén blandas.

Ahora, tritura con la “turmix”, bien triturado. Si eres tiquismiquis, cuela pero no te lo recomiendo.

Vuelve a hervir durante unos diez minutos y deja reposar.

Sírvela en taza o platos guarnecida con queso rallado, un toque de sal, perejil y un chorrillo de AOVE